martes, 20 de septiembre de 2011

Love's a cycle.

When you love, you get hurt.
When you get hurt, you hate.
When you hate, you try to forget.
When you try to forget, you start missing.
When you start missing...
you'll eventually fall in love again.

lunes, 19 de septiembre de 2011

Gente patética. Nivel: Tú.

Llega un momento en tu vida en el que maduras y te das cuenta de quién realmente se lo pasa bien y quién hace el ridículo para llamar la atención.
Podría escribir aquí una larga lista de gente que es verdaderamente patética, pero no os voy a dar ese gusto, últimamente aprecio mi vida lo suficiente como para no meterme en peleas.
Y sí, hoy me dirijo a ti. Tú sabes perfectamente que hablo de ti, sabes que no hay nadie que llame tanto la atención (patéticamente hablando) como tú.
Sí, tú. Esa persona que ve necesario contarle a todo el mundo con quien ligapara parecer más guay o popular. La que realmente cree que oor parecer más puta que las demás en sus fotos va a ligar más o algo.
Tú, más parética que poner en el estado "Tee quiieRoo, poOrquue NoO ttee DaaS cuueNtaa?? :(" (y mira que eso ya es MUY patético). Tú, tan patética que el chiquilicuatre a tu lado parece hasta normal y todo. En fin, tú.
¿Realmente te crees superior a las demás por vestir mejor o ligar más? ¿Realmente crees que le vas a caer mejor a los tíos por ser así de guarra? ¿Realmente eres tan tonta para creerlo? Pues sí, has llegado al mayor nivel de ridiculez.
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"¿Pero sabes una cosa? No te deseo más mal. Porque siendo como eres, bastante tienes ya".

domingo, 18 de septiembre de 2011

¿Y si te confieso algo?

Hoy he soñado contigo.
Por lo visto estábamos juntos, y brotaba felicidad de cada uno de los poros de nuestra piel. Era extraño. No me he llegado a acostumbrar (y eso que he tenido unas maravillosas 11 horas de sueño). Era como si tú estuvieras ahí desde siempre y ya se tomara como algo habitual. Era tan, pero tan extraño para mi que yo era consciente que era un sueño, ya que en la realidad era imposible que eso ocurriese, y eso hacía que el sueño fuera más sueño.
Y era esa naturalidad; eso de que pareciese que lleváramos juntos toda la vida, eso de que actuáramos tan corrientemente, lo que lo hacía más extraño aún... ya que realmente, cuando estás cerca me tiemblan las manos, el corazón me late deprisa, se me corta el habla y me sudan las manos.